Las especias son ingredientes fundamentales para darle sabor a un platillo. El orégano es una de las más populares en todo el mundo. Además de ser conocido por el delicioso gusto y aroma que aporta, también muchas personas le atribuyen propiedades medicinales. Pocos saben que esta hierba es una aliada para combatir dolores articulares. Aquí te contamos todos sus beneficios.
¿Qué es el orégano?
El orégano se cataloga como una planta aromática. Otros nombres con el que se conoce son mejorana silvestre y orenca y es parte de la familia de las Lamiaceae. Sus hojas son pequeñas, tienen forma ovalada y su color es verde oscuro. Es muy fácil de cultivar, pues se da en casi todo tipo de suelo aunque de preferencia en climas cálidos. Esta especia tiene un amplio uso en la cocina, pues se utiliza como condimento en diversos platillos, especialmente de tipo mediterráneo. ¡Es indispensable en la salsa de tomate que se emplea para elaborar pizzas! También, se prepara como infusión para remedios caseros, pues se le atañen propiedades medicinales.
Contenido nutricional
Son varias las vitaminas, los minerales y las sustancias nutricionales que posee el orégano. Por cada 100 gramos de la especia se concentran: 335 kcal, 11 gr de proteínas; 10,3 gr de grasas; 49,5 gr de carbohidratos; 42,8 gr de fibra, 1.580 mg de calcio, 44 mg de hierro, 270 mg de magnesio; 4,4 mg de zinc, 15 mg de sodio, 1.670 mg de potasio, 200 mg de fósforo, 690 microgramos de vitamina A; 18,9 mg de vitamina E; 6,2 mg de vitamina B3; 1,04 mg vitamina B6; 0,17 mg vitamina B1 y 0,52 mg de vitamina B2.
Adiós, dolor de rodilla
El orégano tiene varios usos en la medicina naturista por su contenido nutricional; sin embargo, hay una función de la planta que es muy poco conocida. La especia contribuye a la producción de colágeno en el cuerpo. Esta acción es importantísima, pues el colágeno interviene en el fortalecimiento de las articulaciones y los músculos. Esta proteína se vincula a la formación y buena salud de tendones, ligamentos, huesos y piel. Es por ello que muchos lo recomiendan como un potente calmante de afecciones como el dolor en las rodillas, un mal común (a cualquier edad) que suele incrementarse con el paso del tiempo. Adicionalmente, la acción de la hierba en la mencionada dolencia se potencia porque posee flavonoides y polifenoles que sirven para neutralizar el deterioro que generan los radicales libres, responsables, entre otros, de enfermedades como la artritis. El orégano tiene un efecto antiinflamatorio y analgésico que minimiza el dolor muscular y articular. Esto es gracias a los terpenos y felones que tiene en su composición.
Cómo usar el orégano para aliviar tus rodillas
La mejor manera de emplear el orégano para combatir el dolor de rodilla es ingerirlo en forma de té. Una vez dentro de nuestro organismo, actuará en la generación de colágeno. Lo ideal es beber una o dos tazas diarias. Para prepararlo, lo ideal es contar con orégano fresco, aunque también puede usarse seco. En una olla se pone a hervir una taza de agua. Al burbujear se retira el agua del fuego y se le agregan cinco (5) ramitas frescas de orégano (10 g), o una (1) cucharada de orégano seco. Luego, se tapa la olla y se deja en reposo por 10 minutos. Finalmente, se procede a colar y se ingiere.
Otros usos medicinales
El orégano posee varios componentes que le otorgan propiedades medicinales. Una muy efectiva es para el tratamiento de enfermedades respiratorias, virales o resfriados que generan congestión nasal, tos, mucosidad o dificultad para respirar. En estos casos se prepara un aceite de orégano y se unta directamente en el pecho o espalda del paciente. Adicionalmente, también se puede tomar el té para un mayor alivio de los síntomas. La ingesta de las infusiones y tés de orégano también ayuda a reforzar el sistema inmune, acelerar el metabolismo, mejorar la digestión, fortalecer el corazón, mejorar la circulación y desinflamar el organismo. Su uso tópico contribuye en calmar los dolores de cabeza, desinflamar heridas, aliviar la tos, los síntomas del asma y la gripe.
